UELLASPñRiSGñRNi£R HermanosHUELLASLITERARIASLIBROS DEL MISMO AUTOR.ULTRAMARINOS.MOSQUETAZOS DE ARAMIS.LITERATURA DE HONAFOUX.PRÓLOGO DEL SPOLIARWMCOBA.EL AVISPERO.ESBOZOS NOVELESCOS.HUELLASLITERARIASl.r S >J H( X A KOUX-^PAKIS(>ahmi:r hermanos, i.ihreros-kditores1894DEDICATORIA\ /)O.V NICOLÁS I-:STEV.\SEZ.Mi ain¡<'u :aceptarQuiere usted hacerme el favor de;la dedicatoria de este libro?No lo dedico al ni al polilico,i)ublicisla,hombre sinceroni al soldado; dedicólo al ypublicistasjusto. Porque no me admiran losnotables, ni los políticos consecuentes, ni losveteranos de la patria. Lo que me admira eshombre cabalmente honrado,encontrar un yexpresa la ad-usted lo es. Y como cada unoexpresomiración según puede, yo se la áusted dedicándole, á falta de cosa mejor, estemayor defecto consiste en decirlibro, cuyola verdad.me cuestaYo no la puedo evitar, aunquemuchas amarguras, innumerables trabajos,un tronchado, toda una vidatodo porvenirpública cortada en su principio... Rebuscandoen las páginas de mis libros la causa de losque me dispensaron alguua vez pue-motinesbenéficos, de las persecuciones que noblosvivir en paz, de todo el horrorme-han dejadocalumnias ha vomitado lade injurias queydeprensa contra mí, deduzco que la verdadmis libros tiene la culpa de todo.Pienso seguir diciéndola en los sucesivos,j^orqme el decirla es más fuerte que yo, aun-que deseo librarme de palos pedradas. Unyestacazo no es un argumento, pero noto ...
UELLAS
PñRiS
GñRNi£R HermanosHUELLAS
LITERARIASLIBROS DEL MISMO AUTOR.
ULTRAMARINOS.
MOSQUETAZOS DE ARAMIS.
LITERATURA DE HONAFOUX.
PRÓLOGO DEL SPOLIARWM
COBA.
EL AVISPERO.
ESBOZOS NOVELESCOS.HUELLAS
LITERARIAS
l.r S >J H( X A KOUX
-^
PAKIS
(>ahmi:r hermanos, i.ihreros-kditores
1894DEDICATORIA
\ /)O.V NICOLÁS I-:STEV.\SEZ.
Mi ain¡<'u :
aceptarQuiere usted hacerme el favor de;
la dedicatoria de este libro?
No lo dedico al ni al polilico,i)ublicisla,
hombre sinceroni al soldado; dedicólo al y
publicistasjusto. Porque no me admiran los
notables, ni los políticos consecuentes, ni los
veteranos de la patria. Lo que me admira es
hombre cabalmente honrado,encontrar un y
expresa la ad-usted lo es. Y como cada uno
expresomiración según puede, yo se la á
usted dedicándole, á falta de cosa mejor, este
mayor defecto consiste en decirlibro, cuyo
la verdad.
me cuestaYo no la puedo evitar, aunque
muchas amarguras, innumerables trabajos,
un tronchado, toda una vidatodo porvenirpública cortada en su principio... Rebuscando
en las páginas de mis libros la causa de los
que me dispensaron alguua vez pue-motines
benéficos, de las persecuciones que noblos
vivir en paz, de todo el horrorme-han dejado
calumnias ha vomitado lade injurias quey
deprensa contra mí, deduzco que la verdad
mis libros tiene la culpa de todo.
Pienso seguir diciéndola en los sucesivos,
j^orqme el decirla es más fuerte que yo, aun-
que deseo librarme de palos pedradas. Uny
estacazo no es un argumento, pero noto con
espanto que son muchas las gentes que quie-
ifen argumentarme en esa forma. Una esta-
hedística curiosa que elaborado arroja los
siguientes datos :
Injurias que me han dirigido. 2.564,325
Calumnias 3.2rJ7,411
Palos recibidos á través del
Atlántico 613,508
Bofetadas á igual distancia.. 131,625
Total de horrores.
. . 6.546,869
No sé cómo me queda vida para contarlo.
Porque de regreso á sus lares, cuando vienen
por casualidad esos marqueses de Mores iné-
ditos, me mutilan.
— Yo, aíirma uno, encontré á Bonafoux en
una calle de Londres, sin decirle oste niy,