Las crisis recientes de Argentina y Japón: lecciones para Colombia (The Recent Crisis of Argentina and Japan: Lessons for Colombia )
12 pages
Español

Découvre YouScribe en t'inscrivant gratuitement

Je m'inscris

Las crisis recientes de Argentina y Japón: lecciones para Colombia (The Recent Crisis of Argentina and Japan: Lessons for Colombia )

-

Découvre YouScribe en t'inscrivant gratuitement

Je m'inscris
Obtenez un accès à la bibliothèque pour le consulter en ligne
En savoir plus
12 pages
Español
Obtenez un accès à la bibliothèque pour le consulter en ligne
En savoir plus

Description

No disponible

Informations

Publié par
Publié le 01 janvier 2002
Nombre de lectures 9
Langue Español

Extrait

LAS CRISIS RECIENTES DE
ARGENTINA Y JAPÓN: LECCIONES
PARA COLOMBIA
Carlos Esteban Posada P.*
INTRODUCCIÓN
continuación presento un conjunto de descripciones y conjetu-Aras que a mi juicio son pertinentes para ayudar a entender dos
casos recientes de crisis y depresión, los de Argentina y Japón. Estos
casos pueden tener impactos significativos, aunque indirectos, sobre
la economía colombiana. Extraer lecciones para nuestra economía,
como intento hacerlo, no sólo es factible sino también provechoso.
Para empezar, enuncio varios elementos, unos más conocidos, otros
menos, de los casos de Argentina y Japón. Algunos de estos
elementos o rasgos se pueden considerar manifestaciones de causas más
profundas y menos evidentes; otros son en sí mismos causas. La
narración se refiere principalmente a lo sucedido en los años noventa y en
los dos últimos años, pero en el caso japonés aludo a sucesos de fines
de los años ochenta estrechamente relacionados con los eventos
posteriores.
En una sección posterior incluyo una descripción de algunas
características diferentes y similares entre ambas crisis y propongo una
interpretación. Finalmente deduzco algunas lecciones para
Colombia.
* Investigador, subgerencia de estudios económicos, Banco de la República,
Cra. 7 n.º 14-78, cposadpo@banrep.gov.co. El contenido de este documento es
responsabilidad exclusiva del autor, por lo que no compromete a la institución ni
a sus directivas. Se agradecen los comentarios de Luis Eduardo Arango y Jorge
Restrepo, y las sugerencias de Lucía Montoya y Mauricio Pérez. Intervención en
la conferencia La crisis argentina, 5 de marzo, Universidad Externado de
Colombia. Agradezco los comentarios del comité de árbitros externos de la Revista
de Economía Institucional. Fecha de recepción: 5 de marzo de 2002; fecha de
aceptación: 25 de abril de 2002.
REVISTA DE ECONOMÍA INSTITUCIONAL, VOL. 4, N.º 7, SEGUNDO SEMESTRE/2002216 Carlos Esteban Posada P.
RASGOS GENERALES DE LOS CASOS ARGENTINO Y JAPONÉS
ARGENTINA
1. Su anterior régimen cambiario (el de los años noventa,
denominado “caja de conversión”) empezó a propiciar dudas sobre una posible
devaluación desde fines de esa década; las expectativas de
devaluación y el creciente endeudamiento externo generaron altas tasas
reales de interés (gráfica 1).
2. Las dudas empezaron a surgir una vez agotado su proceso de
privatizaciones, y quedaron en evidencia: a) el desorden fiscal (causa
1principal del endeudamiento público externo ); b) la falta, en la
primera mitad de los noventa y en los años siguientes, de un incremento
de la productividad multifactorial en el sector de bienes “transables”
capaz de sustentar (esto es, hacer sostenible en el largo plazo) la
2revaluación real observada entre 1990 y 1997 , y c) la decisión de que
no se hagan reformas para dar flexibilidad al mercado laboral y tener
control sobre la situación fiscal.
Gráfica 1.
Un indicador de la tasa de interés en Argentina: el spread de su deuda
externa
7500,0
Argentina
6000,0
4500,0
3000,0
1500,0
Brasil
México
0,0
Fuente: Servicio de información Bloomberg.
1 Un reciente artículo (no publicado) de Leonardo Villar, La crisis argentina:
lecciones para Colombia, febrero de 2002, hace énfasis en el problema fiscal, y es
bastante ilustrativo al respecto.
2 “Mi intuición es que hay algo en Argentina que estructuralmente le impide
crecer, y que lo ocurrido en el período 1991-1997 fue sólo un crecimiento ‘no
sostenible’... ” (Comentario de José Darío Uribe al artículo mencionado de Villar).
Sobre la evidencia de revaluación real del peso argentino hasta 1996, ver Perry
(2002).
Ene-00
Mar-00
May-00
Jul-00
Sep-00
Nov-00
Ene-01
Mar-01
May-01
Jul-01
Sep-01
Nov-01
Ene-02
Mar-02
May-02LAS CRISIS RECIENTES DE ARGENTINA Y JAPÓN: LECCIONES PARA COLOMBIA 217
Pero, “desorden fiscal” no significa “déficit fiscal”. Un déficit fiscal no
es causa de algo, es un efecto. Y parte del déficit fiscal argentino se
debió al lento crecimiento de su economía y a su depresión posterior.
Cuando se menciona aquí el desorden fiscal se alude a una política de
gasto público expansiva durante la fase de auge (Perry, 2002) y a un
comportamiento del gasto público regional (el de las provincias) que
el gobierno central no controló ni contrarrestó de manera eficaz, y
que contribuyó al déficit fiscal conjunto y al creciente
endeudamiento público tanto externo como interno.
Con respecto al tema de la deuda pública, el problema argentino
no era tanto el nivel, pues en el 2001 llegó a ser “apenas” el 52% del
PIB (ibíd.), sino la velocidad de crecimiento de la deuda y de las
causas ya mencionadas.
Por otra parte, un indicio del estancamiento de la productividad
en el sector de bienes transables es el hecho de que en los años
noventa, la contribución de la oferta de bienes argentinos transables
para satisfacer la demanda y contrarrestar el déficit de la cuenta
corriente externa argentina era la menor entre las de todas las grandes
3economías latinoamericanas .
3. Las altas tasas reales de interés generaron recesión, dificultades
financieras, tendencias deflacionistas y crecientes cargas reales de la
deuda.
4. La deflación agravó la carga de las deudas, a pesar de que
per4mitió contrarrestar la tendencia a la revaluación real . En efecto, las
dificultades para prever la tasa de deflación e incorporar su
expectativa en los contratos financieros tienden, cada vez que eso sucede, a
generar un aumento en el valor real de las deudas y de su servicio.
5. Ya desde principios de 1999 se suspendieron las entradas de
capital a Argentina (Calvo, 2002).
6. Las dudas sobre la continuidad del régimen cambiario se
reforzaron desde principios de 2001, cuando el gobierno empezó a
ejecutar una política monetaria (de expansión del crédito del banco
central) incompatible, a la larga, con la convertibilidad 1 a 1 (ibíd.).
7. Una dolarización plena y oficial realizada de manera oportuna,
por ejemplo en algún momento entre 1991 y principios de 2001,
podría haber contribuido a frenar el aumento de la tasa de interés real
si paralelamente se hubiese mantenido la anterior política austera de
3 Ver la medida de “apertura de oferta” presentada por Calvo (2002).
4 Entre junio de 1998 y septiembre de 2001, la tasa de cambio real argentina
(frente al dólar) aumentó el 14%, gracias a la deflación, pero esta devaluación
real fue menor que la observada en las monedas de dos de sus competidores
importantes, Chile y Brasil (Calvo, 2002).218 Carlos Esteban Posada P.
crédito del banco central. Por lo demás, una dolarización induce una
demanda de cambios institucionales; pero si no hay una oferta
adecuada de nuevas instituciones (reformas del sistema bancario,
laboral, fiscal, etc.), todo el peso del ajuste recae en cambios de precios
relativos y en traslados sectoriales y geográficos de trabajadores. Ahora
bien, es usual, y en Argentina fue ostensible, que se presenten
resistencias.
8. La suspensión de los pagos de la deuda pública (cuyos
tenedores no eran sólo extranjeros sino también bancos argentinos, fondos
argentinos de pensiones y otros agentes nacionales), las
renegociaciones de deuda, las restricciones para el retiro de depósitos
bancarios (con las cuales se intentó proteger a los bancos), el
abandono de la convertibilidad peso/dólar a la tasa 1 a 1, el establecimiento
transitorio de un sistema cambiario dual y la “pesificación” de activos
y depósitos bancarios a tasas arbitrarias son procesos traumáticos y
ad hoc que implican redistribuciones de riqueza y el establecimiento
apresurado de impuestos y subsidios parcialmente compensatorios y
prolongan la desconfianza en el sistema bancario (ibíd.).
9. Los efectos de las medidas proteccionistas de comercio exterior
establecidas en vísperas de la crisis y durante la crisis fueron
desastrosos por la pérdida de confianza, pero prácticamente fueron
despreciables para las ventas de la industria local.
JAPÓN
1. Su economía presenta síntomas de recesión desde principios de los
años noventa. Así, la tasa anual de crecimiento del PIB real total entre
el segundo trimestre de 1991 y el segundo trimestre de 2001 fue de
1%, lo cual significa que el PIB per cápita dejó de crecer, y esto ha
sucedido en medio de algunas depresiones y recuperaciones cortas.
De manera paralela se ha observado una intensa desinflación que se
5ha convertido ya en deflación (gráfica 2) . La deflación está
agravan6do la c

  • Univers Univers
  • Ebooks Ebooks
  • Livres audio Livres audio
  • Presse Presse
  • Podcasts Podcasts
  • BD BD
  • Documents Documents